Tury, lord of bigotes de piedra 2

Después de platicar esta aventura tan desastrosa con tury, tocaron la puerta de su casa.

-“!llego Carlos!”, grito la madre de tury.

Carlos, un amigo de nosotros que también era del club de la prepa generación 98. Quien a pesar de su corta estatura tiene un voz de gigante, si no lo conociera de tanto tiempo pensaría que es comediante y finge la voz para disimular su corta estatura.

En cuanto Carlos cruzo la puerta, la madre de tury dijo:

- Tury, ¿me vas a llevar a la iglesia, verdad? Lleva a tus amigos.

- “¿quieren ir?”, Pregunto tury; como si ir a la iglesia fuera simpatía de todos, como si no hubiera religiones para cada uno y escuchar alabanzas y sermones fueran cosas de todos los días.

Pero después le siguieron unas mágicas palabras

- “a comer birria” - ¿a comer birria a la iglesia? (Pregunte) - Si

Ya no importo el nombre de la iglesia, no importo el nombre del dios que alababan, ni el color o versos de la Biblia que leían.

La birria es birria en cualquier parte de México, me la sirva quien me la sirva. así de sinico me la iba a comer, esperando que no me diera diarrea.

En menos de 5 minutos ya estábamos en camino, y en menos de 10 minutos atravesamos medio Mexicali.

Era por la colonia nacozari, atrás de los centros nocturnos que se pueden considerar lo mejorcito de Mexicali… esos que en menos de un mes tienen un nombre diferente.

Toda la gente estaba vestida de mexicanos. En realidad, las mujeres de adelitas y los hombres de Mario Almada, otros de Ramon Ayala y otros de forma desinteresada.

- ¿Cuanto vamos a tardar aquí? (Pregunte a tury quien iba caminando a un lado de su madre)

- pues no se, nada mas comemos y nos vamos.

Sabias palabras de un hombre que no le alcanza el tiempo y lleva una carrera contra la vida.

- pues si, nada mas comemos y nos vamos. dijo la madre de tury, afirmando que esas son sabias palabras modernas.

Después de tacos de birria, tacos de machaca y tacos de ojo. Consideramos hora de partida. Pero la madre de tury, parecía muy contenta con sus amigas.

- Ho no, va a empezar a tocar un grupo y se miran muy cristianos.

- espera me llaman por teléfono. (Dijo tury)

El que había llamado era Emilio, quien se había enterado que en la fiesta estaban dando birria.

- Tráiganme, culeros… desde hace tiempo tengo antojo de birria. No puedo ir por que estoy en el café Internet.

Compramos dos platos, uno para Emilio y otro para su esposa.

Carlos tomo un plato y se sentó en el asiento de copiloto, yo tome otro plato y me senté en el asiento trasero, mientras tury conducía rumbo hacia la colonia prohogar. la madre de tury se quedo en la fuista mexicana, luego pasariamos por ella.

Después de un balbuceo entre Carlos y tury, me dijeron: - haber tapiocadas, a ver que harías tu.

Esa frase “haber que harías tu”, ya sabia que era una pregunta de una situación casi inexistente en la vida imaginaria de un ser humano, como cuando me preguntaron si asesinaría a George Bush o si tendría relaciones sexuales con la tigresa, o aquella mítica de que preferiría: morir por leones o por negros en la cárcel.

- venga, hagan la pregunta. (Respondí)

- “Que escogerías, ¿andar con una rubia o una morena?”

Después de decir esa frase, siguió una pausa y después una risa misteriosa por parte de Carlos.

- pues…

- espera aun no termino… que pasaría si la rubia tiene las tetas picudas y con los pezones de hot cakes.

Ho por dios, el peor deseo de un hombre, pezones de hot cake con tetas picudas…

- ¿Que tan grandes los pezones?

- Enormes! Que no entiendes que son de hot cakes!

- Y ¿la morena? ¿Que tiene de malo?

- La morena no tiene nada de busto, solo los pezones pintados en su pecho.

Mientras pensaba como librarme de esta pregunta, hice lo mas común y corriente, me fui por la puerta fácil, la que dirían todos los afeminados que creen que la vida tiene sentido y las cosas no se dan por casualidad.

- pues yo escogería a quien…

Antes de que terminara mi discurso, me interrumpió Carlos y me dijo.

- Ah , ah nada de eso. Las dos tienen los mismos gustos que tu.

Ho no, estaba arrinconado. No tenía salida.

Tenia que escoger y no explicar mi respuesta, solo decir, “yo escogería a tal y se acabo” a quien no le guste mi respuesta, que chinge a su madre... pero claro que despues de una respuesta vienen las criticas y comparaciones.

Pero no tenía respuesta y así pasaron dos largos minutos.

Cuando ya iba a decir mi respuesta.

- Pues yo escogería a:

Hubieran visto la risa que tenia Carlos en su cara, era malévola, era desesperante, me devoraría vivo. El estaba con la mitad de su cuerpo en el aciento de copiloto la otra mitad volteando hacia mi con el plato de birria en las manos, no podia voltear mas por que el cinturon de seguridad se lo impedia y en eso. Hubo un frenon.

Había algo en el monumento de Lázaro cárdenas, una muestra de arte o fotografía y un tipo salio corriendo como si esa glorieta fuera el patio de su casa.

- “haaaa gracias pinché pendejo!” grito Carlos por la ventana.

Se había tirado la birria en cima de su pantalón justo en las bolas.

- Que guey eres (le dije a Carlos y se le olvido de que estábamos hablando)

Librándome de contestar la pregunta incomoda.

Gracias pendejote anonimo. Gracias. (dije en voz baja)