24 enero 2010

La historia de "Tapiocadas, vale menos que una cucaracha"

Esta es la historia de cuando fui peor que una cucaracha (segun la sociedad), siendo el malo de la historia, pero a la vez como mis estupideces hicieron un final feliz para todos, menos para mi.
Bueno, la contare en la siguiente semana, ya que ultimamente me ha dado por hacer fotomontajes.

17 enero 2010

La Sra. peño**s

Ayer en una fiesta me encontré a la Sra. peño**s, así le digo de cariño, ya que su apellido es p****ri. Pero desde la primera vez que le dije por ese apodo, le pedí permiso, y ella acepto ya que se le hizo gracioso.

Hace mucho que no la miraba y mi primera expresión fue:

- Woao esta igualita.

Pero no, cuando ella se levanto de la silla tenia cuerpo de señora, creo que en la fiesta había señoras con hijos que se miraban mejor que ella, pero que le puedo hacer, a veces soy hipocrita.

Algo me hace recordar a la Sra. peño**s es la película ”The Matrix” ya que una vez en aquellos tiempos del 2004 cuando íbamos en la universidad, ella fue un día vistiendo una gabardina negra y unos lentes obscuros. Y claro que se me salió decir:

-hay peño**s, Matrix!

Ella muy seria dio un paso para atrás y con un tono de voz seco y fulminante me nockeo.

-Hay tapiocadas, tú y tus pendejadas.

Me quede callado y serio, no supe que contestar, ya que no soy una vieja arguendera; pero son de esas cosas que te acuerdas ahorita y las platicas despues de tantos años y te dan risa.

Después de esa anécdota, recorde que me habían contado una historia sobre ella, de cuando trabaja en una tienda, a lo que ella contesto casi fantasmagóricamente.

- No es cierto, todas esas cosas que te contaron no fueron ciertas, ya me regenere.

Esa última frase en la oración y su cara tornada a cálida, me hicieron afirmar aquella historia, que es tan desagradable y morbosa que la voy a contar.

Advertencia: el siguiente contenido es obsceno, amarillista y sexista. Si usted sigue leyendo es porque a Ud. le gusta este tipo de contenido.

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Una vez hubo una fiesta en su casa, la verdad yo siempre creí que ella era lesbiana ya que tiene cuerpo de tal y un carácter especial, pero al parecer me equivoque.

Ya que la fiesta estaba acabandoce y ella estaba esperando que los más borrachos se fueran, la mayoría apenas y podían caminar por la embriaguez. Ahí se paró el Apodaca y dijo convoz titubeante “voy a mi arbolito”.

El Apodaca, se dirigió a la parte trasera de la casa, donde esta un tendedero y se dispuso a hacer de sus necesidades causadas por beber y el frio, se bajo el zipper y saco a su cachetón trompudo a llorar las penas, cuando el Apodaca termino se sacudio y se dio la media vuelta, para su sorpresa, la Sra peño**s le estaba esperando por detrás acechándolo como gato a ratón, y se le lanzo con la boca abierta.

El Apodaca no puso ni la menor resistencia y empezó a disfrutar el momento, de repente se le ocurrió colgarse del tendedero para ponerle las piernas alrededor del cuello y los hombros, haciéndole un candado jiujitsu, hasta que tiraron el tendedero, la Sra. peño**s duro 1 semana con collarín.

Después de que me contaron la historia, quede en shock, ya que el Apodaca había terminado de orinar en ese momento. A lo que me hizo recordar mi primer beso.

Pero Claro, mi primero beso vaginal, donde también yo la había agarrado después de ir al baño y su vello púbico tenia esencia a orina, que por su puesto al hombre no le es de impedimento. (Bueno depende de que mujer sea)

Pero nunca lo había pensado en una mujer, como que es más directo el asunto, es como bañarse en verano directo de la manguera y probaras el agua y te da sabor a fierro o a plástico.

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Después de recordar tal historia volví a mirar a la Sra. peño**s, y su cara seguía sonrojada, a lo que me hizo pensar que hizo más travesuras que yo nunca sabré.

Ahora cada vez que yo iba al baño, me asomaba si estaba ella detrás de mí, que para mi mala suerte nunca apareció.

*Nota: eso de “cachetón trompudo” una vez se lo escuche a mi prima. Y se me hizo apropiado mencionarlo en este post.

16 enero 2010

La fabulosa Historia de la Sra. peño**s

Ese eddy Balardy se parece al "mil chistes"
Mejor maniana les cuento la historia de la sra peño**s

08 enero 2010

Lo que hacen los gringos por unos pesos

Bueno la verdad, es un comercial chistoso, arriesgado y novedoso. ah y muy acertado en la ironia.
Me dejo con la boca abierta cuando la vi.
algo asi me paso tambien cuando mire a unas jovenes pidiendo dinero en las calles de mexicali, disque para bajar la luz, ponerce en huelga con la CFE y no se que, pero estaban tan bien arregladas que me dejaron sorprendido, osea... poner a chavas bonitas en la calle "rio nuevo" a pedir dinero, claro que no les di ni un centavo, pero me alegraron el dia... y que buena zorreada di.

igual que este video, me alegro el dia, y cada vez que lo ponen en la tele me detengo de lo que estoy haciendo, para verlo.
de hecho entre a youtube y lo baje, por que si pasara a la historia jo jo jo

05 enero 2010

Fer y su hermano, la segunda y ultima historia


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Ya habían pasado dos semanas después de la fiesta de mi hermano. Donde casi puedo jurar por la cruz del monte calvario, que mi hermano realizo una de sus fantasías poéticas, tener relaciones sexuales en la cama de mis padres. Embarrando las sabanas de flujos vaginales, saliva y semen.
Ya que al final de la fiesta acompañe a Martha a su carro y me quede platicando con ella mientras toda la gente se despedía. Y cuando ya no había ningún ruido alrededor, solo se escuchaban unos quejidos sofocantes.
A las dos semanas me llamo la atención un olor a humo que venia fuera de mi casa, Salí a ver que pasaba y era mi hermano quien estaba quemando las fotos que se había tomado con mari, diciendo que ya habían cortado y que ella volvió con su ex.
Se me salió la palabra de la boca y dije:
-¿y que? ¿Era el amor de tu vida?, tú dijiste que nada mas le gustaba volar a los hombres.
Me fui corriendo de ahí antes de que se volviera loco y me aventara al fuego, como niño después de de hacer la maldad.
Al día siguiente Martha me llamo al celular para invitarme a una fiesta, en un antro. Yo no pregunte cual era la razón, solo acepte contento de que la vería.
Cuando colgué el teléfono entro mi hermano a la sala y se sentó a ver la televisión, cambio el canal del televisor y se quedo callado, no negare que me sentí bien de verlo tan derrotado, causando pena ajena y justificándose en forma muy patética.
Pero algo causo un efecto de compasión en mí, no se que fue en realidad, quiero pensar que marta me hizo sentir feliz por haberme llamado y no pensar que fue algo familiar lo que sentí por el, y dije:
-Voy a ir a una fiesta en la noche, quieres ir?
El se negó inmediatamente, con su palabra favorita
-mmmmsssshhhhaaaaaaaa
Me levante y me dirigía a tomar un baño, cuando de repente dijo.
-Esta bien pues, si voy.
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A las ocho de la noche pase por marta, mi hermano no quiso irse en la cabina de atrás del pick up, así que ella se sentó en medio de nosotros, haciendo que cuando yo metiera el cambio de velocidad en mi pick up estándar, mi mano rozara con su pierna. Al principio trate de evitar esto, pero después lo goce.
-¿Por que es la fiesta? (Le pregunte antes de que llegáramos)
-Es cumple años de Carlos. Respondió,
Sentí incomodidad, y me sentí pendejo por no haber preguntado esto antes. Carlos era su ex novio, de repente mi mente paranoica empezó a hacer suposiciones, las cuales son las que no me dejan tener una vida placentera.
¿Por qué ella querría ir a una fiesta de su ex novio?
¿Le gusta todavía?
¿Soy su pendejo, el cual siempre será su amigo?
¿Quiere que su ex novio la vea con migo? ¿Quiere que su ex novio la vea con migo? ¿Quiere que su ex novio la vea con migo?
Esa fue la mejor suposición que pude hacerme, por fin, tanto tiempo tratando con ella, al fin.
Llegando a la fiesta, saludamos a todos, y al parecer Carlos aun no llegaba. Me senté con mi hermano en una mesa que estaba reservada junto con marta y su amiga. Hasta que llego Carlos.
Carlos saludo a todos y al final vino a nuestra mesa, todo fue tan actuado, que llego a ser uno de esos saludos que no se disfrutan. Al parecer el estaba tenso por la presencia de marta, que actuaba en una forma de exageración combinada con desinterés que ni me dieron ganas de seguirle hablando.
Después de un rato marta se levanto de la mesa y dijo:
-ahorita vengo voy al baño.
Me quede en la mesa platicando con su amiga, hasta que mi hermano la invito a bailar. Mi hermano ya tenia el tercer botón desabrochado de la camisa, con uno que otro pelo torcido acechando a la presa, además el se había puesto los zapatos de charol de mi padre y hasta los shainio.
Después de una hora, marta no había vuelto a la mesa y la empecé a buscar, hasta que la mire platicando con Carlos afuera del antro. En cuanto los vi me escondí de tras de un poste de luz. Me moví lentamente Y me regrese.
Después de dos cervezas, mi hermano se sentó a un lado y se quejo del dolor de pies que sentía, hasta que me pregunto:
-¿por que no bailas?, ¡Baila con marta!, ¿donde esta marta?
-Esta con… (Justo cuando iba a terminar de decir “Esta con Carlos” Carlos paso a un lado).
espérame, ahorita vengo. (Le dije a mi hermano, quien apestaba a caldo de cebolla)
Salí a buscar a marta, y la encontré caminando hacia el baño nuevamente, iba un poco agitada y me dijo, ya me quiero ir.
Aprovechando que ella se metió al baño, fui por mi hermano para avisarle que ya nos íbamos.
-Hey, ya nos vamos.
-¿Que? ¿Pero por que? Me respondió.
Mi hermano ya estaba abrazado de la amiga de marta, quien acababa de conocer. Me dio cosa, ver a la tipa abrazada de mi hermano empapado en sudor, oliendo a cebolla y justo los pelos del pecho le daban en la cara.
Después de 15 minutos de convencer a mi hermano para que nos fuéramos, mire que marta salió del antro.
Mi hermano se despedía de su nueva amiga intercambiando el E-mail. Mientras le decía:
-“te voy a agregar al my space”
Cuando salimos del antro, marta ya estaba arriba de un carro que yo nunca había visto, pero el conductor me pareció un poco familiar.
Me acerque a la ventana del carro donde ella estaba sentada y le dije:
- ¿ya te vas a ir?
-si, respondió ella.
Me quede hecho piedra y no dije nada. Mi cerebro supuso todo y solo le dije:
-yo también ya me voy.
Le hice una seña a mi hermano de que nos fuéramos al carro, mientras sentía una brisa fría sobre mi frente que ardía, sentía que me había violado un negro, sentía que trabajaba para la iglesia y el padre me tocaba mis partes, sentí tantas cosas… que no se comparan con lo que en realidad sentí.
-¿hey donde esta marta? (Dijo mi hermano, para remover el dolor)
-Se va a ir con su amigo. (Le conteste)
-¿pero por que? Si ella vino contigo, ¿ahora se va con otro? ¿Esa morra que se cree?
Mi hermano salió corriendo al carro donde estaba marta y le empezó a reclamar de por que me había dejado solo toda la noche, de por que se iba con otro, de por que me hacia esto si desde hace tiempo a mi me gustaba mucho.
La forma de tener un final decoroso con marta se fue, mi hermano rompió la poca decencia que tenia. En su forma de protección, me humillo como Paco Stanley con Mario Bezares, me hizo bailar el gallinazo enfrente de ella, mientras me aventaba cacahuates.
-lo hice por tu bien, pinche morra que se cree, ¿que te puede tratar como pendejo?
Dijo mi hermano cuando ya íbamos en camino a casa, mientras me arrepentía de no haber tenido el valor de abandonarlo mientras pude.
-cállate con tus pinches pendejadas que te salen de la verga que tienes como cerebro, pero vas a ver pendejo me las vas a pagar, me voy a vengar y me voy a reír culerisimamente de ti.
Dije en mi mente, como regalo de consolación.
Una vez le llame a marta, para saludarla. Pero me dijo que se había puesto de novia con Arturo, con el que se fue el día de la fiesta.
A Marta no le volví a hablar, ya que “no voy a ser su pendejo, el cual siempre será su amigo”.
A veces solo me acuerdo de cuando íbamos al cine y ella metía los sándwiches en su bolsa junto con las sodas de litro. Con suerte el sándwich tenia un tampón colgando o aveces tenia un dulce olor a cotex de manzanilla.
Mi hermano volvió con mari, y a veces no me dejan dormir los quejidos que ella hace a las 2 de la mañana.

01 enero 2010

Fer y su hermano, entre un par de nalgas redondas y jugosas



Fer: 
- Mi hermano me invito a su fiesta de semana cultural en la Universidad. Donde todos sabemos que de cultural no tiene nada.
Al principio dije que no iría, pero él me convenció diciendo que habría cerveza toda la semana y que me presentaría a muchas de sus amigas.
Yo acepte, pero no fue por ninguna de estas razones, si no para convivir mas con el, ya que siempre estamos peleando y nos gritamos hasta para decir “!con permiso!”.
Mi hermano me gana por 4 años y para mí ya es un viejo, panzón y chillón a morir con las mujeres. Cada novia que tiene dice que es el amor de su vida. Y después de cortar con ellas… quema las fotos diciendo que es la última vez que llora por una mujer.
El primer día de la semana cultural, fue aburrido extremo. En cuanto llegue a la fiesta toda la gente estaba en su rollo, con sus problemas y sus gritos. Era una casa de infonavit, chiquita como caparazón de tortuga, donde al dar un paso entrabas a la cocina y si levantabas los brazos, uno se salía por la ventana y el otro brazo estaba en el baño.
Pero después de unas cervezas la gente se empezó a relajar, y caminábamos encimándonos unos contra otros, como refugio de gusanos encimados, o si lo quieres escuchar un poco menos asqueroso, éramos como espagueti enrollados.
Ahí, una rubia se me acerco, Mari dijo que era su nombre. Chaparrita con las mejillas saltadas, de piel morena clara y un gran trasero.
Platique con ella por 3 horas y la verdad no se de que, en realidad no sabia que yo tenia tanto tema de conversación, tanto humor, tanta simpatía.
Y tampoco recuerdo de que hablo ella, solo miraba sus ojos, sus labios y su boca. Y me reía cada vez que ella terminaba de hablar. Mientras a lo lejos miraba a mi hermano y lo saludaba de vez en cuando, presumiendo que no tenia que estar junto a el para conocer gente, para pasármela bien.
Ya entrada la madrugada mi hermano me hizo una seña con la mano de “vámonos ya”, me despedí de Mari y me fui contento al pick up el cual lo estacione una cuadra a lo lejos, ya que había mucha gente y no había lugar donde dejarlo.
En el camino mi hermano me dijo:
-oie Fer, vi que te la pasaste hablando con la rubia, creo que se llama Mari. ?Te gusto o que onda?
(Pensé, ya va a empezar con su pinche carrilla de niño de primaria, donde me debería de avergonzar de que me guste una mujer). a lo que conteste.
-No, la verdad casi no me gusto, pero fue la única que me hablo y le seguí la platica para pasarla bien.
Mi hermano se quedo callado hasta que llegamos al carro, el entro por el lado del copiloto y yo maneje a casa. En el camino el dijo:
-te preguntaba de Mari por que a ella le gusta volar a los hombres y luego los deja bien sarra, y te lo digo por que no me gustaría que te pase eso, como hermano menor que eres para mi.
(Este guey y sus pinches mamadas, me caga que se la de de buen hombre, de héroe salvador). y le respondí:
-Ah ok, ok, no hay falla, que bueno que me dices. Hay que pasar por los hot dogs de Don Chuy, para cenar algo.
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Dos días después hubo otra fiesta, y ahí estaba Mari platicando con otro tipo, solo la salude cuando llegue y me aleje inmediatamente al descifrar las señales de humo que ella me dio para que la dejara sola con su amigo.
Me la pase tomando en una mesa con una gorda que conocí y tampoco le puse atención a lo que decía, ni siquiera mire sus grandes senos que se sostenían en la mesa ya que al parecer no tenía brasier. No me apetecen los pezones grandes y oscuros como hot cake quemado. Asi que solo miraba las pendejadas que hacia mi hermano poniéndose una tanga y saliendo corriendo todo borracho abrasando a todos.
De ahí en adelante ya no recuerdo nada, ni como llegue a la casa.
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Al día siguiente había otra fiesta, la última de la semana cultural y fui, para alivianar la cruda, (Aun que creo que toda via estaba ebrio). Después de dos caguamas me senté en el piso y mire al tipo que estaba hablando con Mari el día anterior, sentado en la mesa con la gorda que no usaba brasier, y hoy tampoco era la excepcion.
Me pare y busque a Mari, recorriendo toda la casa, con dos caguamas en las manos, con dos pasos que daba recorría cada habitación, hasta que la encontré.
Ella estaba en una recamara que no tenia puertas y tenia la luz apagada. Platique un poco con ella y después la abrace.
Al acabarse la cerveza ella se puso bocabajo y dijo que ya tenía sueño, que se quería dormir.

-¿Te quieres dormir? ¿Quieres que te ayude a dormir? Le dije sin preámbulos.
Ella sonrió muy sexy mente mientras el pelo rubio le tapaba los ojos.

-Ok, ayúdame.

Me monte arriba de su nalgas y le empecé a dar un masaje por el cuello y la espalda. Un calor insoportable invadió la habitación y me hizo tener sed, me hizo oler mal, me hizo sudar sobre ella, sin oír ninguna queja alguna.
Justo cuando frotaba mis partes con su nalgas y pensaba pasar a un segundo acto, alguien encendió la luz.
Era la gorda y dijo:
-Haaay que rico, un masaje… yo también quiero uno!
Se aventó a la cama como ballena azotando al mar y exigió un masaje en su cuello y su espalada. El cual yo di sin levantarme de las nalgas de Mari.
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Mi hermano llego a la habitacion y trato de portarce buena onda, pero ninguna de las chicas le hicieron caso. Asi que se levanto y me dijo que nos fueramos ya, por que mañana tenia que hacer algo importante.
En el camino al carro, otra vez mi hermano dijo las mismas palabras del primer día de fiesta:

-Te vi sobre mary y sobre julia la que nunca usa brasier. Cuidado con Mari ya te dije que solo le gusta calentar el agua y no se mete a bañar.

-si, ok. Le respondí.

Mientras me preguntaba, (que se la habra pasado haciendo toda la pinche fiesta, para estar tan perreado e irme a vigilar?).
Nunca más volví a ver a Mari, a veces me masturbaba pensando en ella, recordaba el aroma de su piel y esa sonrisa que relucia escondida detras de esa cabellera rubia. mi cuerpo frotandoce contra el suyo mientras le daba mi masaje especial.
Hasta que llego el cumpleaños de mi hermano. Fue a finales de octubre.
Mary llego vestida de muñeca y se miraba sexy hasta los dientes, esa combinación de erotismo con inocencia, hacia a todos ejercer la erección.
La salude y hable con ella pocos minutos, hasta que mi amigo Eddy empezó a vomitar cerca de la cerveza, mientras su novia le daba palmadas en la espalda y le tomaba la presión.
Eddy solo gritaba “Estoy bien, estoy bien” y empezó a patear la basura, para después acostarse arriba de ella.

Cuando ayude a Eddy a levantarse y lo subí a su carro, su novia lo llevo a su casa. Ahi volví a buscar a Mari con la vista y cuando la encontré, ella estaba besándose con mi hermano, mientras bailaba una canción de Beck, más bien no era besarse, era sexo con las lenguas que llegaban hasta la campanilla, perforando la garganta.
Bueno, es su cumpleaños, dije, maldiciendo la suerte de mi hermano y pensando que ese pude haber sido yo. Si no fuera por el pinche Eddy vestido de momia.
En ese momento llego Martha, encendiendo luces en su camino, la razón por la que no me había enojado tan pateticamente contra mi hermano fue por ella, Martha... de pelo negro, ojos un poco rasgados, con una sonrisita picarona llena de brillo labial olor a fresa, chaparrita con grandes curvas.

Ella había sido novia de Carlos que para mi suerte ya había cortado con ella hace una semana. Según él, pensó que podía conseguir algo mejor en la pecera de mujeres que hay en la ciudad. Disparo a las estrellas y la bala no paso más allá de la vista.
Mi amigo Carlos se dio cuenta de que no era lo suficientemente bello como pensaba, Pero por respeto a mi amigo no hice nada sobre acercarme a Martha, "solo guardare respeto por dos semanas y no mas", eran mis pensamientos al bailar con Martha mientras a mi nariz entraba el olor de su labial.

Al día siguiente mi hermano me dijo que el y Mari eran novios y a las dos semanas siguientes me dijo que ya habían cortado.
El empezó a llorar y a quemar sus fotos diciendo que seria la última vez que lloraría por una mujer.