Edades y la tabla del 8.

Hace una semana estaba en una clase que llevo los sábados.

Ahí estaba mariana hablando con Diana sobre dibujos y cosas que habían visto en la televisión.

Mariana tenía ese peculiar copete teñido de rubio, escondiendo su ojo izquierdo y Diana sacaba los hombros mientras metía la cabeza, como lo hacen las chichonas.

Mariana:
Así como te platique en el msn. ¿Hoy te vas a meter?

Antes de que contestara Diana, tome la palabra y dije:-

Por que no me pasas tu msn, Mariana.

Mariana descubrió su ojo izquierdo con la mano derecha, mientras decía:
¿No te lo he dado? Creí que te tenia agregado al myspace.

Tapiocadas:
- No, yo ni siquiera me meto al myspace. (Respondí) 

Mariana:
Mi mama tiene myspace.

Entre en un estado de alerta combinado con estupidez. Quise reír a carcajadas y gritar ¡No es cierto, no te creo!

Pero en vez de eso abrí mi cuaderno y le di mi lápiz.

- Apúntame su correo por favor, para agregarla.

Diana la otra muchacha que estaba ahí, empezó a reír, hasta que se detuvo y dijo:
¿Para que quieres agregar a la mama de mariana? ¿Te gusta o que?

-Que tiene de malo que la agregue, además no me puedo imaginar el myspace de la mama de mariana, que fotos tendrá o que descripción tendrá en su profile.

Mariana se sonrojo y titubeo al escribir el correo en el cuaderno.

Cuando termino de escribirlo, dijo:
-Bueno, aquí esta… y pues… no esta casada. Seria divertido decirte papá.

WTF, me quede con la vista en la pared e imaginando lo que trataba de decir.

Pero que puedo pensar de Mariana, quien se declaro ser un vampiro, baila canciones japonesas y toca la guitarra con sus amigos de 13 años.

--Si, seria divertido salir del trabajo y llegar a la casa y decirte: Hola mija, que hay de comer. ¿Ya llego tu mama?, dile que me voy a dormir un rato.

Mariana: ¿wooo en verdad te gusta?

Ahí empecé a reír y no le respondí.

Yo nunca había visto a la madre de Mariana, pero me parecía absurda la idea de pensar que me podría enamorar de una persona con 15 años mayor que yo.

Al terminar la clase, mientras me fumaba un cigarro en el transcurso del salón de clase al Carro. Mire que habian llegado por mariana y trate de mirar a su madre, que por el angulo en el que me encontraba no pude. Era la morbosidad en su máximo esplendor, lo que me orillo a voltear. Estaba buenisima, toda una milf.

Al llegar a mi casa estaba mi abuela en la cocina y había una niña en la sala.
Esta niña es julia y vive en la casa de enseguida.
Julia es una niña de 9 años que estudia la primaria.

-¿Julia que haces?

Julia:
--Es que vine con la nana, para que me ayudara a entender las multiplicaciones.

Esta persona a la que julia llama "nana" es mi abuela y me asombro que le dijera asi, ya que solo la lleva conociendo desde hace 4 meses. Aun que lo curioso es que sus hermanas tambien le dicen asi y su mama tambien.

-A ok, a ver. yo te ayudo.

Mientras le ayudaba a resolver las multiplicaciones que le habían encargado de tarea. Mire que algunas estaban mal.

-Esta mal. ¿Cuanto es 8 x 6?

Ella agacho la vista y empezó a mover los labios y a balbucear, movía los dedos y los chocaba contra sus rodillas.

En eso, mi abuela sale de la cocina y llega diciendo, 48.
Julia abrió los ojos y empezó a mover los dedos más rápido, hasta que dijo. Si es cierto.

-A ver… esta también esta mal, cuanto es 3 x 8.

-- 24 grito nana.

Julia volvió a hacer la misma cara mientras decía:
Nana, si es cierto… como se la sabe…

--Pos claro, si no soy pendeja. Si te sirven para siempre, no más que andas de tonta que no te las quieres aprender.

Siguieron las pláticas entre ellas y yo me fui a mi cuarto a dormir un rato. Pasando por el pasillo largo que divide los cuartos con el mío.

Después de una hora, me dirigí a la cocina para servirme algo de comer.

Pase por la sala, donde mi abuela estaba acostada en el sofa que queda justo al frente de la televisión.

al sentarme en el sofa, le pregunte: 

-¿Ya se fue julia?

-- Si, ya se fue y a que no sabes que me dijo la caraja esta.

-¿Que?

--Que su hermana la Fernanda, esta enamorada de ti.

Entre en un estado de alerta combinado con estupidez, lo único que se me ocurrio decir fue:
-Que demonios, si Fernanda tiene 11 años.

--Si, eso fue lo que le dije a Julia, pero ella muy en su papel dijo “para el amor no hay edad”

-Que deje de ver novelas y se ponga a estudiar las tablas, es lo que debería de hacer.

--Es lo que le dije a la caraja esta.

Mi abuela empezo a reir mientras se iba a la cocina.
yo me quede en la sala viendo la television y pensando en la carrilla que me iba a dar toda la semana, hasta que se me ocurrio hecharle carrilla con el doctor que le toca los viernes una vez al mes.