27 febrero 2008

Einstein y Escutia

Juan Escutia:

- Según Albert Einstein: Solo hay 2 cosas infinitas... El universo y la estupidez humana; Aunque a veces dudo si el universo sea infinito.

Ayer me dijo Víctor, que estaba loco por una mujer. Abusando de nuestra amistad, le dije que no estaba loco, que estaba pendejo. 

El me contesto...

- La quiero, para que me hago pendejo, me hago pendejo por que ella me pone pendejo, y ella me pone pendejo, por que me gusta que me ponga pendejo.


24 febrero 2008

my Friends

Paaawwwaaaaauuuuunnnnnnn shakaaaa Paaawwwaaaaauuuuunnnnnnn
fueron los sonidos del Abraham cuando me dijo que tenia el Guitar Heroe 3

NOOOOOOOOOOOOoooooooo a poco sale la de Bulls on paradise?
le pregunte.

El solo movio la cabeza en manera de afirmacion.













09 febrero 2008

Pussy things, about me


Hace tiempo que no hacia lo que hacia hace dos años y ahora que las hago, me ahogo en aburrimiento.
No somos los mismos, como dicen por ahí.
-No, ni madres.
No puedes comer en mi cama por que tiras todas las palomitas y cuando me duermo, me levanto oliendo a mantequilla y chile.
Ayer andaba hablando con toño en el trabajo y cuando termine de decirle: cállese pinchi gordo lanchero.
Me di cuenta que estaba hablando con mi tía.
-¿Me ayudas a cambiar la llanta del carro?
Es que me lastime la espalda, ¿si te acuerdas que te dije? Ándale!!!
Si quieres, me pongo atrás de ti para taparte la ralla de la nalga cuando te agaches.
Los de Recursos Humanos me querían mandar a Tijuana con un carro que le fallan los frenos y la transmisión.
Le dijeron a mi jefa que solo había ese carro y que otras personas también irían.
Jefa: Ni modo Tapiocadas. Te toco ir en ese carro.
Tapiocadas: ah bueno ya si fallan los frenos me llevo a otros con migo.
(Me gane el oscar por el drama que hice).
Que onda guey, hace un chingo que no te miraba, ¿te acuerdas que cuando tenias 6 años y te ponías a jugar muñecas con mi hermana?
Ya se que siempre te lo recuerdo, pero es que nunca se me olvida, ja ja.
Le dije a mi tío que se llevara el carro Mustang año 83 mejor conocido como el tronco-móvil, el todo es mejor que este, el cagadero, etc.
Y hasta que se descargo la batería me dijo se lo iba a llevar.
En ese carro, choque, me chocaron, brinque arriba de el, le puse un fierro con un candado para que no me robaran la batería, el rene se orino en el asiento de atrás, me queme la mano, espalda y cara cuando se calentó.
A pesar de todo nunca le compre estero, ni bocinas, espejos, tapetes, pero si le compre como 20 llantas usadas por ponchaduras.
- Oiga, puede de dejar de decirme PAISA, ¡Por favor!
Ya van como 20 veces que me dice así y yo no soy del sur como para andar aguantando esa palabra.
Fui a ver Juno con una amiga en el cine del centro CA. Y metió la pizza en su bolsa.
Cuando me la dio en la sala de cine, mire que tubo que despegar sus toallas íntimas del papel aluminio que cubría la pizza.
Mmmm estaba buena, sabía rica, pero olía a manzanilla.
- ¿oye quieres ir al cine?
¿Si?
A que bueno ya con tigo somos tres.
Es que iba a ir con el tury, pero como que dos hombres parece muy gay.
Pero ya somos 3 y ya parece mas patético, pero no gay.
_________________________________________
Cuando mire la pelicula de Pedro navajas escuche un dialogo que me dejo sin palabras La novia de pedro interpretada por maribel guardia le dice: - Ya estoy arta de ti!!! siempre llegas oliendo a sexo y con marcas en el cuello!!! Pedro responde, muy indignado. - Es mi trabajo!! soy un padrote. a poco un mecanico no huele a aceite y se mancha de aceite?

02 febrero 2008

No es Monche es Monica. Aun recuerdo el olor de su saliva en mi cara

Estaban Víctor y Juan en la casa de los Escutia’s, platicando sobre lo que iban a hacer esa noche en la fiesta del pueblo en que festejaban a los santos sin nombre.

-Hoy es el día, hoy es el puto día en que le voy a decir todo lo que siento, la conozco hace dos días, fue en el lago que me gusta ir. Estaba nadando y ella estaba sentada en el árbol grande que tiene las ramas largas donde me gusta colgarme.

Es ella, lo se. ¡Es que me dijo que a ella le gusta nadar en ese lago como a mí! ¡Le gusta la nieve de limón como a mí! Y también piensa que nuestras partículas algún día estaban en el espacio y se reunieron para darnos vida. Y cuando muramos volverán a viajar allá en el cielo, lejos con las estrellas o se consumirán en el sol y ahí será cuando en verdad moriremos. Ella es mi otra mitad, lo se.

Dijo Víctor a Juan, después de haber conocido a monche.

-Que bien, estaré atento a todo lo que pase. Nada más que no me vallas a dejar de hablar por estar con ella todo el tiempo. Respondió Juan Escutia.

El día de la fiesta, Víctor se fue vestido con la ropa de Juan Escutia ya que el tenia mejores trajes y como era un caso especial en la vida de Víctor, Juan se la presto sin ningún compromiso alguno, tardaron como 1 hora en escoger cual era la adecuada que combinara con la ocasión; los zapatos adecuados y hasta el perfume.

Al llegar a la fiesta la cual estaba localizada afuera de la iglesia en la calle principal, Víctor miro a monche en el puesto de tamales, acompañada de su madre quien estaba pidiendo comida.

-ohhhh ahí esta. Dice Víctor dando la espalda a monche para que no lo reconociera.

-Wooooo espera, respira no se va a ir, ¿ya estas listo?- Dice Juan quien también se volteaba para que no lo reconocieran.

-No, no estoy listo. Creo que si voy a platicar con ella, pero no le voy a decir nada. Creo que estaba emocionado y tal vez la emoción de hoy no será la emoción de mañana y mañana me reiré por lo que estaba pensando hacer hoy, entonces…- Después de que Víctor balbuceara un rato y rodeara el objetivo principal que tenia. Juan se puso la mano en la frente y se limpio el sudor, tomo un respiro y empezó a hablar.

-Entonces… entonces que… ¿callaras como un cobarde y al final de tu vida estarás con alguien que no ames? ¿Por que te va a dar vergüenza decirle lo que sientes a monche?, ya que si te dice que ¡NO!, pues seras su amigo hasta que te enfade y cuando te des cuenta ya vas a estar casado y con hijos a la edad de 49 años como tu padre.

Al terminar de decir estas palabras Juan Escutia se fue de ese lugar. Empujando a todas las persona que estuvieran a su paso. Hasta llegar al otro lado de la calle. Después se agacho y regreso corriendo encorvado por atrás de los puestos, para que Víctor pensara que se hubiera ido y así poderlo espiar con alevosía y ventaja. Juan se paro justo en la entrada de la iglesia atrás del puesto de tamales, pudiendo apreciar todo el escenario.

Víctor al perder de vista a Juan se quedo pensando en que decir, cual seria la primera frase que diría, que preguntar o que comer, ya que ha esa hora tenia un hoyo en el estomago.

-Creo que primero me comeré un taco de fríjol-. Pensó Víctor.

Al acercarse al puesto de tacos sintió un jalón en la espalda, cuando volteo estaba monche con los brazos abiertos y una sonrisa que le estiraba la cara hacia los lados en forma de arco.

-oh Víctor eres tu, te confundí con otra persona, nunca te había visto con ese traje, creí que eras… olvídalo, ¿que haces? ¿Vas a comer algo? ¿Con quien vienes? Ohhh perdón, no te estoy dejando hablar.

Víctor estaba petrificado, sudando frió, su lengua se había encogido y se la había tragado por error. Mientras Juan disfrutaba de cada segundo que pasaba viendo tal espectáculo.

Víctor: -Nada, aquí, vine solo, y si voy a comer, ¿quieres ir a comer algo?

Monche: -No, ya comí unos tamales muy buenos, pero me quede con sed, no quieres una nieve de limón, de esa que nos gusta tanto.

Víctor: -si, eso estaba pensando.

Juan disfruto de la función toda la noche, cuando se comieron la nieve, cuando ellos jugaron el juego de la lotería, el juego del pez dorado y cuando monche le presento toda la familia a Víctor.

Cuando víctor y monche ya se iban, Juan estaba emocionado por seguir jugando al espía por todo el camino en el que ellos tomarían, hasta que llego su madre preguntándole:

-¿Hijo que haces?, no te había visto toda la noche. ¿Que haces ahí escondido como ladrón?. Ven te quiero presentar a unas personas y ¿donde esta tu hermana?

Juan siguió a su madre, perdiendo poco a poco de vista a sus amigos.

Cuando Víctor y monche iban a medio camino de casa, el tubo que decir lo que sentía, era decirlo o quedar amargado como su padre. -¿recuerdas cuando te conocí en el lago? Que estaba desnudo y me daba vergüenza salir del lago y tú querías que saliera para poder meterte por que te importa el que dirán por nadar con un extraño? Hasta que me empezaste a lanzar piedras y casi me ahogo...

Monche: -Si recuerdo que tuve que nadar para salvarte y me lleve una sorpresa al verte desnudo-.

Victor: -Si y nos quedamos hablando de cosas que nos gustan, hasta que el sol se metió-. Y me contaste la historia de las partículas y las estrellas.

Monche: - Si, lo recuerdo si fue hace dos días…

Victor: -Es que, lo que quiero decir es que me di cuenta de que todo lo que me gusta te gusta a ti, es como si me hubieras espiado toda mi vida y de repente me describieras todo lo que hago y tu supieras todos mis sueños combinados con deseos.

Monche: -Si, pero eso solo significa que tenemos cosas en común y seremos buenos amigos, ya que si te pones a pensar la etapa del sentimiento que te gusta una persona puede durar 4 a 18 meses, de ahí en adelante te das cuenta de que estabas equivocado en un principio ya que reaccionaste por un impulso. Yo soy impulsiva y ¿tu si Víctor?

Víctor se quedo callado, confundido con lo que había dicho monche. Pensando si ¿había sido una indirecta para que le dijera que si, o en verdad no quería nada con él?. Cuando Víctor pensaba responder algo llegaron a la casa de monche.

Se despidieron con un beso en la mejilla y cuando monche subía por las escaleras de su casa, volteo a ver a Víctor y le dijo:

-¡por cierto, me llamo Mónica! Monche es solo un apodo feo que me inventaron los de la escuela.

_________

Después de que Juan Escutia termino de conocer a todas las personas que le había presentado su madre, lo sentaron en la mesa de los jóvenes.

-Quédate aquí con Eduardo, es el hijo de los Gaxiola. El acaba de entrar a ser monaguillo… ¿te acuerdas cuando fuiste monaguillo, Juan?. Dijo la Sra. Escutia.

Juan puso un gesto de desprecio en la cara, respondiendo: -si, si me acuerdo- Cuando la Sra. Escutia se perdió en la multitud con la excusa de buscar a su otra hija, Juan Escutia volteo a ver a Eduardo, diciendo:

-Así que eres monaguillo… ¿te toco el padre Mario Torres?- Eduardo volteo a ver a Juan muy temerosamente afirmando con la cabeza. -Ah ya veo, ya te toco el padre Mario Torres. ¿También te toco conocer su cuarto oscuro? Ja ja ja ja ja. No te preocupes, siempre se comporta así con los nuevos. Todavía recuerdo el olor de su saliva en toda mi cara y a veces en las noches tengo pesadillas con sus viejas manos tocándome todo el cuerpo ja ja ja ja. Tu... apenas estas empezando… Eduardo, dices que te llamas verdad?